{wbamp-meta name=”image” url=”images/stories/noticias_08/alineacion-vertical-2.png” width=”300″ height=”150″}
Valorar la alineación vertical del cuerpo puede servirte para que conozcas tus desequilibrios y puntos fuertes, de manera que corrijas los primeros y potencies los segundos.
Se sabe que tener una postura alineada verticalmente, desde la cabeza hacia los pies, parece optimizar la distribución de peso en el cuerpo.
Estar alineado verticalmente, a nivel biomecánico, va a permitir una optimización de tu esfuerzo y algunas articulaciones van a trabajar mejor: cargarás menos las lumbares, los cuádriceps, los isquios, los músculos de la tibia, los músculos de los pies, etc.
Antes de saber cómo corres o cómo caminas, si es que no lo sabes, deberías de valorar tu estado: ¿cómo puedes hacerlo?
Pasado esos 2 minutos, te pregunto:
Todos los puntos anteriores te pueden dar distinta información acerca de tu postura:
Posteriormente, si te es imposible mantener esta posición, es importante saber qué te hace estar lejos de la vertical. Saber los motivos (el verdadero porqué) permite trabajar sobre los mismos; es decir trabajar sobre el origen y no sobre el resultado. Un ejemplo de esto que te cuento sería: el motivo para que la pelvis se separe de la pared puede estar en los pies. En este caso, habría que trabajar los pies y su conexión con la pelvis.
Por supuesto que sí. Estar en una posición postural próxima a la vertical hace que el cuerpo funcione de forma más eficiente. Cuando el cuerpo esta cerca de la vertical se puede desplazar más fácilmente a todos los lados. Por otro lado, cuando no esta cerca de la vertical (por ejemplo, más adelantado), hay estructuras que están trabajando constantemente para mantener esa vertical, lo que implica que no descansan. Además, estar muy desplazado hacia una posición, impide un rápido movimiento a la posición contraria.
Si eres un corredor, puedes valorar lo que te digo cambiando la posición de tu tronco y ver cómo afecta a las piernas. Otra forma es poner una mochila en la espalda o en el pecho y ver cómo afecta de forma diferente a tus piernas o a tus apoyos. Desplazarás más peso hacia una pierna o hacia la otra, dependiendo de cómo pongas la mochila.
Lo mismo ocurre cuando tienes una postura u otra: es como si llevaras una mochila o en una o en la otra posición.
Tener una postura alineada verticalmente puede influir en tu rendimiento. Para saber cómo tienes tu postura debes de valorarlo y esto te va a aportar la información para que cambies lo que debes de cambiar.
Si quieres conocer el concepto de movimiento que aplico puedes obtener más información en www.exploramovimiento.com