Un cura participará en un triatlón en Abu Dabi para salvar su catedral

No es habitual ver a un sacerdote enfrentarse a un triatlón, pero Andy Bowerman, Deán de la Catedral de Bradford, está a punto de hacerlo.
Este 8 de febrero participará en el TriYAS 2025 (Distancia olímpica) en Abu Dabi, con un objetivo que va más allá del deporte: recaudar fondos para su catedral.
Con 53 años y una operación de rodilla en su historial, Bowerman ha decidido afrontar su primer triatlón para ayudar a sostener el funcionamiento de su iglesia. “Nunca he corrido una prueba así y, tras mi cirugía de rodilla, es un gran reto personal. Pero lo haré porque creo en la causa”, explicó el sacerdote británico.
Para Bowerman, esta competición será algo más que un esfuerzo físico. Todo el dinero que logre reunir con su desafío ayudará a cubrir los gastos de la Catedral de Bradford, un edificio histórico que cuesta más de 2.850 euros al día para mantenerse en pie y continuar con su labor educativa y cultural.
De la iglesia al asfalto: su preparación
La vida de un deán es ajetreada, pero Bowerman ha encontrado el tiempo para prepararse. Su principal entrenamiento ha sido su participación en un parkrun semanal en Bradford, donde poco a poco ha ido recuperando su resistencia.
“El TriYAS 2025 será difícil, pero estoy emocionado. Es un reto personal y, al mismo tiempo, una oportunidad para hacer algo importante por la Catedral”, comentó Bowerman.
Su pasado en la Premier League y Dubái
Aunque ahora está completamente dedicado a su misión en Bradford, Bowerman no es ajeno al mundo del deporte. Durante once temporadas, fue capellán del Southampton F.C. en la Premier League, asesorando y acompañando a los futbolistas en sus momentos más difíciles.
Además, pasó cuatro años en Dubái trabajando con la organización Mission to Seafarers, donde apoyó a trabajadores del mar que necesitaban asistencia espiritual y social.
Cómo ayudar a su causa solidaria
Liz Purchase, responsable de recaudación de fondos de la Catedral de Bradford, explicó que esta iniciativa es clave para mantener el edificio y sus programas educativos y culturales. “Queremos seguir siendo un lugar de inspiración y apoyo para la comunidad”, afirmó.
Aquellos que quieran colaborar pueden hacer donaciones a través de la campaña “Dean Andy Dares!“, creada para apoyar al Deán en su desafío deportivo. Cada contribución será una ayuda directa para garantizar que la catedral siga en pie.
Este 8 de febrero, Bowerman no solo correrá, nadará y pedaleará por la meta, sino también por su fe y su comunidad.