Los planes de Sam Long para 2025
El año 2025 será decisivo para Sam Long. El norteamericano quien ha desvelado su gran objetivo para este año y es el Campeonato del Mundo IRONMAN de Niza, el 14 de septiembre.
Tras un 2024, donde quedó quinto en el ranking mundial de la PTO ha decidido rebajar su calendario a 8 o 9 carreras con la idea de llegar con la máxima energía a cada competición.
Un calendario menos saturado
Durante 2024, Sam Long consiguió victorias en IRONMAN Chattanooga y dos pruebas de 70.3, además de participar en 6 pruebas T100.
Aunque volverá a competir en alguna de esas pruebas para este año su prioridad será reducir el desgaste que ocasionan los largos viajes internacionales.
El propio triatleta reconoce que tantas horas de avión afectaron a su motivación y le llevaron a un punto en que se le “apagó un poco la chispa”.
Por eso, su estrategia pasa por agrupar competiciones en zonas más cercanas para evitar que el exceso de desplazamientos tire por tierra su estado de forma y, sobre todo, su humor. El estadounidense lo tiene claro: si la cabeza no funciona, las piernas tampoco.
El arranque con T100 y 70.3
En la primera parte del año, Sam Long pondrá foco en mejorar su natación.
Arrancará la temporada en T100 Singapur (5-6 de abril) y después irá al IRONMAN 70.3 St. George el 10 de mayo, donde buscará buscar su tercera victoria.
También estará en el T100 San Francisco y el T100 Vancouver antes de entrar en un bloque específico de preparación para su gran objetivo.
Mirando a Kona 2026
Además del Mundial de IRONMAN en Niza, Sam Long planea participar en IRONMAN Chattanooga solo dos semanas más tarde para asegurar su clasificación para Kona 2026.
Aunque insiste en que todo depende de si logra imponerse en Francia, tiene la mira puesta más allá de la próxima temporada.
Además, planea cerrar 2025 con citas como T100 Las Vegas, el Campeonato del Mundo de 70.3 y la gran final del circuito T100.
El poder de un buen estado de ánimo
La clave para Sam Long en 2025 será mantener la alegría y la motivación.
Después de admitir que “perdí un poco la alegría a final de 2024”, ahora se compromete a darse descansos más frecuentes y a pasar más tiempo con su familia para recuperar energías.
Según él, ningún registro de potencia ni frecuencia cardiaca supera la importancia de despertar con ganas de entrenar.
“Si mi humor decae, me tomo unos días tranquilos”, confiesa.
Quiere guardar fuerzas para el IRONMAN de Niza, su cita más grande de la temporada, y demostrar que, con la mentalidad adecuada, puede aspirar a todo en la larga distancia.