Actualización del estado del agua de los Juegos de París 2024
La calidad del agua mejora semanas antes de los juegos

La calidad del agua del río Sena ha sido objeto de un meticuloso seguimiento en el marco de los preparativos para el triatlón de los Juegos Olímpicos de París 2024.
La competición, que se llevará a cabo en el emblemático Pont Alexandre III, ha centrado la atención en la seguridad y las condiciones óptimas para los atletas.
Desde principios de junio, la calidad del agua del Sena ha sido analizada diariamente en cuatro puntos estratégicos: Bercy (margen derecha), Bras Marie, Pont Alexandre-III y Bras de Grenelle.
Estos puntos de monitorización proporcionan datos precisos sobre la calidad microbiológica del agua, centrados en la presencia de dos bacterias específicas: Escherichia coli e enterococos intestinales.
Informe
Un informe reciente, publicado el 4 de julio de 2024 por la Ciudad de París, revela resultados prometedores.
Durante el período comprendido entre el 24 de junio y el 2 de julio, la calidad del agua ha mostrado una notable mejora, cumpliendo con los umbrales establecidos por la directiva europea en la mayoría de los días monitoreados.
E. Coli (concentration level in CFU / 100ml)
Enterococcus (concentration level in CFU/100ml)
Esta evolución positiva se atribuye a las mejores condiciones meteorológicas, como el retorno del sol y el aumento de las temperaturas, así como a las obras realizadas bajo el Plan de Mejora de la Calidad del Agua del Sena.
Sin embargo, no todo ha sido positivo. El 30 de junio, una intensa tormenta en la cuenca del Île de France provocó una degradación temporal de la calidad del agua.
Las fuertes lluvias, que alcanzaron los 24 mm durante el fin de semana, afectaron tanto al Sena como al Marne, reduciendo la calidad del agua en los puntos de monitorización, aunque esta se recuperó rápidamente el día siguiente.
El flujo del Sena se ha mantenido alto, considerablemente superior al observado usualmente en verano, oscilando entre 407 m³/s y 605 m³/s. Este flujo elevado, aunque generalmente beneficioso para diluir contaminantes, se ha visto alterado por la variabilidad climática reciente.
Para los organizadores de los Juegos Olímpicos, garantizar la seguridad de los atletas es una prioridad. Las autoridades locales y los expertos han trabajado incansablemente para asegurar que las condiciones del agua sean aptas para la competición.