Gómez Noya trabaja su punto débil

Javier Gómez Noya vive con la mente puesta en Londres, el lugar en el que dentro de ocho meses tratará de alcanzar la gloria olímpica que los problemas físicos le negaron en Pekín.

El triatleta gallego está llevando una puesta a punto especialmente minuciosa que tiene por objeto depurar hasta el mínimo detalle. Cuesta pensar que después de tantos años en la élite aún quedan cuestiones que mejorar y a eso es a lo que se está dedicando en estos momentos.

El ferrolano acaba de concluir una concentración de tres semanas en el complejo deportivo Playitas de Fuerteventura, período en el que fundamentalmente ha dedicado el tiempo a potenciar el trabajo en natación.

Su entrenador, Omar González, se muestra plenamente satisfecho de esta primera fase de la temporada olímpica en un lugar en el que se sienten especialmente cómodos: “Hemos cumplido con todo lo previsto, unos 40.000 metros cada semana, nadando incluso doble sesión algunos días. La compañía de Pedro Miguel Reig ha sido muy importante para que Javi se exprima.

Estoy convencido de que en el agua Javi está en uno de los mejores momentos de su vida y espero que lo demuestre batiendo su marca de 1.500 en los campeonatos gallegos”. Javier competirá en ellos del 28 al 30 de diciembre en Ferrol, en 200, 400, 800 y 1500 metros libres; el objetivo es rebajar esa marca de 15:42 en la distancia equivalente a la del triatlón olímpico.

Para ello los días previos hará la típica puesta a punto específica de los nadadores. En el segmento que menos domina Gómez Noya quiere estar al mejor nivel, en gran medida para evitar que en Londres se pueda encontrar con una desagradable sorpresa a las primeras de cambio ya que los Brownlee, grandes rivales del gallego, son excepcionales nadadores.

En Fuerteventura las sesiones de bicicleta y a pie han sido de ritmo, sin forzar, para ir acumulando kilómetros . Algunas salidas en bici fueron con los profesionales del Rabobank -equipo concentrado en Playitas- algo que ha encantado a Gómez Noya: “Ha sido un lujo rodar con ellos; aunque no hayan ido fuerte se aprende de como van en grupo y usan los desarrollos. Además he congeniado muy bien con los españoles Luis León, Gárate y Barredo. Incluso me venían a ver a la piscina por las tardes y me han preguntado mucho por la manera de entrenar de los triatletas”.

Fuente:farodevigo.es