La universidad norte americana de Lost Springs ha publicado un estudio, donde detallan que a través de un análisis de los gases intestinales, pueden saber que tipo de nutrientes son necesarios para el individuo y tener una correcta alimentación, lo que garantiza una mejora de rendimiento.
Este análisis se orienta al deportista principalmente, ya que gracias a la compensación de este déficit se puede mejorar el rendimiento de una manera rápida y económica, al saber con una suela prueba que alimentos hay que aportar (o quitar) de la dieta del deportista.
El estudio se basa en el análisis del primer tipo, ya que han demostrado que cuando hay un déficit o exceso, se puede detectar mediante variables como la temperatura, densidad, el olor o la velocidad de expulsión.
Con esto, podrían detectar intolerancias a la lactosa, gluten, etc. factores que pueden ser determinantes en una correcta nutrición.
El cuerpo humano está habitado por una comunidad de microorganismos vivos denominados microbiota. Se estima que está compuesta por unas 1.014 células, diez veces más que el total de las células humanas, la mayoría en el colon, predominando Firmicutes, Bacteroidetes y Actinobacteria.
En ocasiones, un intenso mal olor proviene de trazas de otros constituyentes producidos por la ruptura de proteínas, que indica donde puede estar la causa y así poder aplicar una dieta equilibrada para el deportista.
Han desarrollado un prototipo, donde el usuario tiene que hacer estar tumbado una hora, 3 horas después de someterse a una dieta estricta basada en legumbres, que favorecerá la explosión de gases.
Universidades de España ya se han interesado por este estudio . El primer prototipo está previsto que llegue a la península a principios de Marzo y ya hay un listado de espera de deportistas que quieren participar en este análisis y conocer la mejora de su rendimiento a través de modificaciones de su dieta.
Los Santos inocentes