Esguince de tobillo, prevención, causas y tratamientos

Es la lesión más frecuente de los ligamentos del tobillo, provocada por solicitación más allá de sus límites de elasticidad debido a un movimiento forzado e imprevisto/repentino (torcedura) de la articulación.

Nuestro colaborador Healthing nos cuenta en este  artículo del esguince de tobillo, patología que, al ser de origen traumático, por muy en forma que estemos y por correctos que sean los entrenamientos que realizamos, nadie está libre de sufrir.  

Existen varios movimientos específicos que pueden provocar un esguince de tobillo; el más frecuente suele producirse en movimientos de inversión del pie (flexión plantar + supinación + rotación interna). Cuando sucede de esta manera, las estructuras ligamentosas más afectadas son especialmente tres: el ligamento peroneo calcáneo y los ligamentos peroneo-astragalino anterior y posterior, que proporcionan toda la estabilidad del tobillo en su parte más lateral.

Muchos triatletas y específicamente durante la carrera, suelen producirse torceduras de tobillo en esta zona, originando en la mayoría de los casos pequeños esguinces,  a los que no hay que quitarles importancia, puesto que al ser reiterativos pueden generar inestabilidad articular. Es fundamental tener claros los conceptos principales de un esguince de tobillo para tener una pronta recuperación y vuelta a la actividad deportiva.

¿Qué es ?

Es la lesión más frecuente de los ligamentos del tobillo, provocada por solicitación más allá de sus límites de elasticidad debido a un movimiento forzado e imprevisto/repentino (torcedura) de la articulación.

Según el grado de afectación se puede clasificar en:

Grado I: distensión de ligamento.

Grado II: el ligamento sufre desgarro o ruptura parcial.

Grado III: rotura completa del ligamento. La rotura completa del ligamento puede causar una luxación si se pierde completamente la congruencia articular.

En los esguinces de grado III, la impotencia es máxima teniendo que parar por un periodo prolongado cualquier actividad deportiva, mientras que los de grado II varía en función del tamaño de la rotura así como su localización.

¿Cómo lo tratamos?

El objetivo principal de nuestro tratamiento es la recuperación funcional temprana para evitar complicaciones tardías. Para ello, diseñamos un plan de tratamiento individualizado en función del grado lesional y de las necesidades de cada paciente, basado en la terapia manual (drenaje linfático, manipulaciones osteopáticas, movilizaciones…) aplicación de Game Ready (crioterapia + presoterapia) y sesiones de láser de alta potencia para eliminar la inflamación y el dolor cuanto antes, devolver la movilidad a todas las articulaciones del tobillo y pie y evitar una inactividad prolongada.

En algunos pacientes, para la pronta y correcta cicatrización del ligamento realizamos electrólisis percutánea ecoguiada y técnicas de neuromodulación.

En una segunda fase, el tratamiento se centra en el trabajo propioceptivo y la potenciación muscular, así como en la readaptación deportiva para lo cual nos ayudamos de la plataforma Imoove.

Nuestra recomendación, tanto para los que habéis sufrido ya algún esguince como para los que hayáis tenido la fortuna de no padecerlos es, sin duda, incorporar en vuestra rutina el trabajo de propiocepción y fortalecimiento de los tobillos para prevenir esta lesión, en la medida en la que esté a nuestro alcance y evitar las recaídas o minimizar sus efectos.

 

Más información http://healthing.es/

Contacto:

Healthing,  Calle Serrano, 61. 4ª planta – 28006 (Madrid)

Teléfono: +34 91 426 29 24
 
Foto:naturalezaperfecta.com

 

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